marzo 18, 2010

COSER Y CANTAR

De vuelta otra vez, quería echar un cuento del que me acorde hoy.

Hace un tiempito se me ocurrió la gran idea de hacerme un zafu (un cojín) para meditar porque me parecían caros y pensé que yo fácilmente lo podía hacer.
Total que fui pensando en la idea y fui viendo por YouTube el proceso para coserlo, hablaba sola y decía, bueno si mi abuela a sus ochenta y pico todavía cose, yo puedo coser, si se dibujar un plano puedo hacer un patron, si manejo una computadora puedo manejar una maquina de coser, que tan difícil puede ser cortar una tela y coser en una maquina.
Hice el patron en computadora y lo imprimí, compre la tela y conseguí una maquina, además vi unos modelos arrechisimos y me provoco hacerme uno como esos.
Sabiendo lo mala que soy con una tijera, me puse a cortar la tela, sin ningún tipo de orden, solo quería cortar y cortar, tampoco organice el espacio de trabajo ni nada de eso, empecé a cortar muy cómodamente en la cama, me corte el ruedo del pantalón como a veces me pasa y también corte la sabana, asi que decidí llevarme todo para la mesa y me di cuenta que la estaba rayando, ponle un mantel !!!, pero no… las ganas de terminar no me dejaban organizarme, asi que tire todo en el piso y termine de cortar, con las rodillas marcadas por la alfombra y con dolor de espalda.
Y comencé a unir los pedazos con alfileres para finalmente unirlos con la maquina, que todavía no había probado.
La maquina por supuesto no cosía, la lleve a una tienda y la arreglaron, ya desesperada me puse a probar con retazos de tela y todo era bello. Entonces comencé con la odisea.
Yo no entendía lo que pasaba, pase horas preguntando porque la maquina no cosía derecho hasta que entendí que era mi puslo, que vaina tan arcaica!!! A estas alturas del almanaque uno tiene que coser a pulso? Bueno tampoco era tan trágico hasta el momento que me toco deshacer todo porque estaba torcido, claro, porque las maquinas de coser tampoco tienen UNDO.
La verdad que debe ser un sacrificio tener que vivir de la costura, que hasta cierto punto lo entiendo por la necesidad, lo que no me cabe en la cabeza es que haya gente que lo tenga como hobby y que lo disfrute, que si la aguja, que si el hilo, que si el pedal, que la tela esta al revés, que no veo, que me canso, que me duele la espalda… En que momento se canta? Porque ni me paso por la cabeza poner música, me daba miedo distraerme y coserme el dedo.
Me impresione mucho cuando vi que casi todo lo que me rodeaba estaba cocido, pase muchos días en ese trance diciendo: waoooo esto también lo cocieron… que arrecho…
Entonces eso de coser y cantar es pura paja. Es burda de peluo eso para mi es simplemente una ironía, ni pensar en hacer algo para vestirse, mucho menos combinaciones de colores.
A la final si termine lo que quería hacer, me quedo muy chevere aunque por mi falta de creatividad termino siendo todo negro y no me quedo mas ganas de hacer mas nada con la supermáquina.

En estos días me voy a poner a soplar a ver que tan fácil es hacer una botella... O como que mejor sigo buscando trabajo…